Ubicada en la costa este de EEUU, se alza la legendaria ciudad de Metrópolis. Desde Viajes Aristocráticos os ofrecemos la posibilidad de conocer esta fascinante ciudad, modelo de avance y desarrollo, a través del itinerario que sugerimos.
¿Cómo llegar y cómo moverse en Metrópolis?
Tanto si optamos por la opción ferroviaria como por el autobús, o si aterrizamos en el Aeropuerto Internacional de Metrópolis desde donde el moderno telerrail elevado nos llevará a la Estación Unión, este será el punto donde pisaremos la ciudad. Lo primero que nos llamará poderosamente la atención serán los imponentes rascacielos que rodean la estación destacando la Torre Luthor Corp, primera visita obligada, pues, desde su última planta, el segundo punto más alto de la ciudad, podremos tomar un buen desayuno con bellas panorámicas circulares que seducirán a nuestros ojos.
- Al norte, la Bahía de Metrópolis con la bella Presa de Cao de fondo, única cuya curvatura se posiciona a favor de la presión de la contención. El motivo está en el convencimiento de los constructores en que la calidad de los materiales utilizados podía retar a la naturaleza, simbolizando así la superioridad de los héroes de Metrópolis contra cualquier otro poder.
- Al este, intuiremos la zona histórica, presidida por los antiguos juzgados dominados por esbeltas estatuas doradas cuyas lanzas alzadas reflejan la luz solar cual candelas luminiscentes.
- Al sur, un laberinto de rascacielos acristalados con tonos amarillos y azules.
- Y al oeste, la zona por la que, una vez hayamos desayunado, comenzaremos nuestro recorrido: la barriada del Distrito de Chinatowm.
¿Qué puede ver y qué puede hacer un viajero en Metrópolis?
Desplazarnos hasta Chinatown no será difícil si encontramos algún súper héroe que gentilmente se ofrezca a llevarnos literalmente volando. De no ocurrir, tanto el moderno monorrail elevado que recorre toda la ciudad, el metro con apeaderos en los principales enclaves, o el taxi, son opciones más convencionales.
Una vez en Chinatowm, tomando como punto de partida su famosa y fotografiada Comisaría, podemos comenzar la visita a pie, recorriendo sus coloridas calles en dirección al Teatro Chino de Mannheim, representación de la diversidad de Metrópolis. Es un centro cultural donde podremos encontrar desde exposiciones de gran belleza hasta representaciones matinales de misterioso exotismo.
De allí, atravesando el populoso mercado de Los Centinelas de la Magia, donde se encuentran los más curiosos artículos y souvenirs, llegaremos al Salón Mágico de Madame Xanadu, un centro comercial donde curiosear, buscar y comprar artículos de magia. Y donde tomar un aromático té antes de dirigirnos a nuestro próximo punto recomendado en este itinerario.
La Aguja de La Ciencia, a la que nos dirigiremos a través del Paseo Marítimo que bordea la Bahía, visitando en su camino los hermosos Jardines de Shen Li Po desde donde contemplar la belleza del Puente Glennor y en el horizonte, la Isla Prisión de Stryker.
Recomendamos hacer el trayecto a pie, pues a lo largo del Paseo Marítimo nos entretendremos con artistas callejeros que imitan a los legendarios héroes de la ciudad, pudiendo fotografiarnos a su lado a cambio de unas pocas monedas.
La Aguja de la Ciencia es el mirador por excelencia de la ciudad, si ya desde la Torre Luthor Corp pudimos deleitarnos con unas vistas magnificas, desde la altura de La Aguja, el más alto de Metrópolis, sentiremos ser un súper héroe con poderes para volar.
De vuelta al suelo, saliendo por la puerta principal, nos encontraremos con los famosos Estudios Marvel, rodeados por el exclusivo puerto deportivo con embarcaciones recreativas que dan paseos por la Bahía. A pocas manzanas del puerto, comenzaremos a vislumbrar la alta y característica bola del mítico Daily Planet, donde sus visitas guiadas son de obligada presencia. Y desde allí, a visitar el emblema de la ciudad: La Estatua de Superman.
De camino al Parque Centenario, en el mítico distrito de Midtown, podemos detenernos a comer en cualquiera de los restaurantes que abundan en la zona o bien tomar algo rápido en los muchos puestos callejeros de perritos calientes tan típicos de la ciudad. Si optamos por una buena comida, el Restaurante Bessolo o Riverhouse nos ofrecerán además de manjares exquisitos un ambiente distinguido y exclusivo.
Una vez hayamos visitado la imponente estatua que la ciudad erigió en honor a su mayor héroe, y cerca de la salida oeste del Parque Centenario, se ubica el incomparable Centro Comercial de la calle Cain, donde poder terminar con las compras que durante la mañana no hayamos hecho y desde allí dirigirnos a la Distrito Histórico, para visitar los Antiguos Juzgados, el Ayuntamiento y el Museo de Arte.
Terminada la visita al Distrito Histórico atravesaremos el West River cruzando por el puente Clinton para llegar a la isla del Distrito de Little Bohemia, donde podemos visitar el Paseo Marítimo de Queensland montando en alguna de sus bellas atracciones o disfrutar de un dulce algodón de azúcar. La Universidad y el espectacular Metrodome, donde se celebran todo tipo de eventos a gran escala, tanto deportivos como conciertos o carreras de Monster Trucks. Su inconfundible silueta se divisa desde cualquier punto de Little Bohemia. No será necesario preguntar si juegan los Meteoros de Metrópolis tanto de baseball como de football por la cantidad de universitarios que acuden a sus partidos ataviados con los banderines de sus míticos equipos.
De vuelta al centro de la ciudad, una parada en Laboratorios S.T.A.R centro de investigación avanzada, nos pondrá al día de las últimas tecnologías así como de las más estrafalarias que en su lucha contra la villanía, llevan a cabo. Un deleite si se visita con niños.
Terminada la visita a S.T.A.R, no parar en la Plaza Glen Morgan sería como visitar Nueva York y obviar Times Square. Recomendamos su visita terminando el día para que la luminosidad de sus múltiples carteles nos envuelva con toda su magnitud. Centro de la ciudad, zona financiera y de ocio, las mejores joyerías, tiendas de artículos de lujo, galerías de arte y exclusividad en general. Un deleite para los más exigentes y donde elegir para cenar entre dos de los más prestigiosos restaurantes de la ciudad: Chez Joey o Dynasty.
Este itinerario quedaría incompleto si al menos no citamos la Barriada Suicida, al suroeste de la ciudad, zona industrial parcialmente abandonada donde se encuentra la antigua fábrica de Soder Cola, los astilleros abandonados y el famoso local nocturno As de Tréboles así como otros clubs nocturnos y hostales de cuestionada reputación. Por lo que no es recomendable visitar esta zona si no se va bien acompañado por un súper héroe o seamos auténticos villanos, en cuyo caso se encontrarán en su salsa pudiendo saltar el resto del itinerario y dirigirse directamente allí. 
Para terminar el día es de obligada visita el bar Obilion, lugar de encuentro entre héroes y villanos que al terminar el día no dudan en tomarse un merecido descanso contando en cordialidad, sus hazañas o fechorías, según se trate de unos u otros.
Las plazas hoteleras abundan en Metrópolis, pudiendo elegir para descansar, entre los lujosos hoteles que se alzan por toda la ciudad. Pero si queremos descansar en uno de los mejores hoteles de Metrópolis tendremos que decidirnos entre el Hotel Centenario o el Metrópolis Grande Hotel.
Este rápido recorrido por la ciudad de Metrópolis, solo apto para héroes por lo apresurado del mismo, puede dividirse en varios días para los que no tengan súper poderes pero de una u otra forma, con poderes o no, viajar a Metrópolis, recorrer sus calles, visitar sus monumentos marcará nuestros recuerdos con una “S” roja enmarcada en torno a un triángulo amarillo sobre fondo azul. Desde Viajes Aristocráticos deseamos que os haya gustado.
Este artículo es un pequeño homenaje a Joe Shuster y Jerry Siegel creadores de Metrópolis para DC Cómics en 1939. Desde entonces, a la que también se la conoce como “Ciudad del Mañana” sigue viva.
Por Javier Plana para Viajes Aristocráticos.
